¿Se aproxima la primera visita al odontopediatra de tu hijo o hija? Para conseguir una buena salud bucodental es necesario acudir de manera regular a una clínica dental para que el especialista pueda hacer un seguimiento del estado de tus dientes y encías. Esto también es aplicable para los más peques de la casa.
El odontopediatra se encarga de cuidar el buen estado de la dentadura y la boca de los bebés y niñ@s. Durante esta etapa de la vida los dientes y las encías necesitan de unos cuidados terapéuticos determinados para que puedan desarrollarse sanos y fuertes. Además, gozar de una buena salud bucodental durante la infancia previene la aparición de patologías en la edad adulta.
La primera visita al odontopediatra resulta clave para que, desde niño, se comience con una buena relación con los expertos en salud bucodental. Por este motivo te vamos a dar los mejores consejos en este artículo para que tu hij@ pueda tener una buena experiencia en su primera toma de contacto con el dentista. ¡Presta atención!
El momento ideal para la primera visita al odontopediatra
Puedes empezar a llevar a tu peque al dentista desde la aparición de los primeros dientes (que suele ser en torno al primer año). Es especialmente recomendable cuando la primera dentición se ha completado (en torno a los tres años). Otros momentos claves son la caída de los dientes de leche (sobre los 5 y 6 años) y la aparición de las primeras piezas dentales permanentes (normalmente desde los 7 años).
Cuanto antes lleves a tus hij@s al dentista, más fácil será para tu pequeñ@ acostumbrarse a recibir cuidados de salud bucodental de manos de un profesional.
Lo ideal es que la primera visita al odontopediatra consista en una mera revisión. La experiencia será mucho más liviana que si el pequeñ@ acude por un dolor, molestia o problema en sus dientes y encías.
Otros consejos para que la primera visita transcurra sin problemas
Es importante cuidar nuestra comunicación con los más peques. Por ejemplo, se deben evitar expresiones como “Si no te lavas los dientes vas a tener que ir al dentista” que hacen percibir la visita al odontopediatra como algo negativo.
Es muy útil que la cita con el especialista tenga la apariencia de algo normal y rutinario (que es lo que debe ser). Esto disminuye los niveles de estrés en el pequeño que deja de percibir la situación como una amenaza. Una gran idea es que a la cita acudan con su juguete favorito para que estén entretenidos en la sala de espera. El aburrimiento puede hacer que los niñ@s se pongan muy nerviosos.
Uno de los grandes dilemas es si el adulto acompañante adulto debe permanecer en el interior del gabinete en el que el odontopediatra atiende al niñ@. Lo mejor es dejarse guiar por el especialista que sabrá como actuar en cada caso. En ciertos momentos será la necesaria la presencia del adulto sobre todo para recibir la información necesaria sobre el tratamiento aplicable o para resolver dudas.
Cuando se va a realizar el tratamiento en sí, lo mejor es que el niñ@ se quede sólo con el especialista ya que muchos padres y madres transmiten su nerviosismo a los peques. Como ya hemos comentado siempre se debe atender a las necesidades de cada caso en concreto.
Para que la primera visita al odontopediatra sea un éxito lo mejor es contar con profesionales con experiencia en la salud bucodental de niñas y niños. Estos especialistas saben como tratar a los más peques para que la visita con el dentista sea realmente positiva. En Clínica Dental Valdivia y Armijo encontrarás los mejores expertos para cuidar de tu sonrisa y la de los tuyos.