Es bien sabido, y nos gusta insistir en ello, que la salud bucal está relaciona con nuestra salud en general. Cuidando nuestra boca podemos prevenir algunas enfermedades que nada tienen que ver aparentemente con la cavidad oral. También, si algo va mal en nuestro organismo, influirá en nuestros dientes y encías.
Es el caso de la intolerancia al gluten, que se puede diagnosticar precozmente en los niños si nos fijamos en algunos detalles de su dentadura.
El esmalte
La decoloración o la aparición de manchas, que pueden ser blancas, amarillas o marrones, pueden ser un indicio de padecer celiaquía. Aparecen sobre todo en incisivos y molares y tienen un aspecto simétrico.
Los dientes con apariencia translúcida también merecen una consulta al dentista, que sabrá valorar si debemos visitar a otro especialista.
Fragilidad
Los dientes de los niños celíacos suelen romperse con facilidad. Si notas que ocurre con frecuencia, pide cita con el odontólogo.
Dientes que tardan en salir
No hay que obsesionarse con la edad en la que a los niños les salen los dientes y llega el ratoncito Pérez, pero debemos estar atentos y pedir la opinión de un dentista ante cualquier duda.
El retraso en la erupción de los dientes definitivos es habitual en los casos de intolerancia al gluten.
Sequedad bucal
Las personas celíacas producen menos saliva por lo que la sequedad de la boca es otro síntoma habitual.
A su vez, la falta de hidratación de la boca puede provocar otros problemas como el mal aliento o favorecer la aparición de caries ya que la saliva es una eficaz protección contra las bacterias.
Aparición de llagas
Los celíacos tienen dificultades para absorver los nutrientes de los alimentos y ese déficit puede provocar la proliferación de llagas o inflamaciones de la mucosa bucal.
La celiaquía o intolerancia al gluten es una enfermedad autoinmune que se manifiesta en molestos síntomas relacionados con el sistema digestivo como hinchazón y dolor abdominal o diarrea, además de dificultar una correcta alimentación. Siguiendo una dieta adecuada, libre de gluten, las personas que padecen esta dolencia pueden evitar otras enfermedades más graves y mejorar notablemente su calidad de vida.
Además, con un diagnóstico precoz seguido del tratamiento correspondiente se pueden evitar las afecciones dentales antes mencionadas. Por eso es importante vigilar la salud dental de los más pequeños y comenzar cuanto antes con revisiones periódicas.
En Valdivia y Armijo, tu clínica dental en Málaga, tenemos muy claro que cuidar nuestra boca desde una edad temprana tiene muchas ventajas y te animamos a vengas a visitarnos.
