Invisalign es la ortodoncia transparente más famosa del mundo. Por su comodidad y discreción cada vez más personas escogen este método para mejorar su sonrisa. Y da un buen resultado a todas las edades.
Normalmente relacionamos la ortodoncia con la adolescencia y los años de instituto. Era origen de muchos complejos para quienes la llevaban, además de un proceso largo y doloroso, aunque el resultado merecía la pena.
La etapa de crecimiento es la más idónea para aplicar un tratamiento de cambio de posición de los dientes, pero nunca es tarde para mejorar la sonrisa, y mucho menos para poner solución a un problema de salud. Además, los resultados no dejan lugar a dudas: merece la pena iniciar un tratamiento de este tipo en la edad adulta.
La salud bucodental, más importante que los años
Aunque la edad no influye para que el dentista aplique una ortodoncia, sí es importante que las encías y los huesos se encuentren en buen estado. Como a medida que cumplimos años nuestro cuerpo se deteriora, es posible el especialista encuentre algún inconveniente para iniciar este tratamiento en personas mayores, pero podemos llegar a una edad avanzada con una buena salud bucodental si hemos sido cuidadosos y no hemos sufrido ninguna enfermedad que haya afectado a nuestra dentadura. Igualmente, personas jóvenes pueden presentar un mal estado periodontal, por lo que tampoco se recomendaría una ortodoncia.
Todos queremos una sonrisa perfecta
El principal motivo por el que los adultos deciden ponerse una ortodoncia es el estético. Corregir alguna imperfección que se dejó pasar en la infancia o conseguir una sonrisa perfecta.
Los brackets metálicos son unas de las opciones que nos ofrecerán en la consulta del dentista. Ahora son más cómodos y estéticos y los hemos visto en personalidades como la Reina Letizia.
La solución preferida es usar alineadores transparentes, como Invisalign, porque pasan totalmente desapercibidos y los resultados se notan en pocas semanas. Esto anima a muchas personas a mejorar algunos detalles de su dentadura con la que no están satisfechas.
Y no solo es una cuestión estética, también hay personas mayores que inician este tratamiento para mejorar su calidad de vida, por ejemplo quienes sufren apnea del sueño.
Nuestra sonrisa cambia a lo largo de los años
Hay que tener en cuenta que los dientes se mueven durante toda la vida. También se desgastan. En definitiva, el aspecto de nuestra dentadura cambia, por eso es posible que nuestra sonrisa nos guste menos a los cincuenta años que a los veinte: sencillamente no es la misma.
Los dientes también pueden desplazarse por alguna enfermedad en las encías, que podría provocar incluso la caída de alguna pieza. Eso afectaría al resto de la dentadura por lo que sería necesario reordenarla.
En Valdivia y Armijo, tu clínica dental en Málaga, somos expertos en Invisalign y estaremos encantados de estudiar tu caso, si crees que necesitas algún retoque en tu dentadura. Pide cita y pronto notarás la mejoría.