En los tratamientos con ortodoncia invisible es muy habitual el uso de ataches. Son pequeñas elevaciones realizadas con composite que se colocan sobre la superficie de los dientes. Su principal función es ayudar en el movimiento de las piezas dentales para conseguir mejorar la estética y la funcionalidad de la dentadura.
Los ataches sirven como puntos de apoyo para que unq ortodoncia invisible pueda ejercer una presión sobre determinados dientes y provocar que se muevan de la manera deseada. Del mismo modo, también pueden servir como freno para que algunas piezas dentales mantengan su posición. El objetivo es siempre conseguir una sonrisa bonita y una mordida correcta.
El número y la ubicación de los ataches dependerá las necesidades de cada caso. Por este motivo siempre se requiere realizar un estudio totalmente individualizado bajo la supervisión del ortodoncista.
¿Cómo se colocan los ataches para una ortodoncia invisible?
Primero se elabora una plantilla o férula a partir de un molde de los dientes en la que también se incluyen los ataches con la posición y las formas indicadas para mejorar la mordida del paciente.
El dentista limpia la superficie dental donde se colocan los ataches con las herramientas habituales. Los huecos de las plantillas donde van los ataches se rellenan con el composite. Posteriormente se coloca la férula sobre la dentadura del paciente. Con una lámpara para polimerizar se consigue que los ataches queden duros y pegados al diente. Es un proceso totalmente indoloro que dura muy poco tiempo.
Como ya hemos indicado anteriormente, cada caso se trata de manera particular. En algunas ocasiones los ataches no se usarán con los primeros alineadores y se colocarán en momentos posteriores. También se pueden retirar los ataches iniciales para colocar unos nuevos. Es el ortodoncista quién valorará de manera individualizada las necesidades de cada paciente según la evolución del tratamiento.
Cuando se acaba el tratamiento con ortodoncia invisible se procede a quitar definitivamente los ataches. El proceso es muy sencillo y se realiza mediante un pulido que no afecta a la superficie del diente. Para este proceso el odontólogo se puede ayudar de una lámpara ultravioleta con la que puede localizar los ataches sin problemas.
Otros aspectos sobre los ataches que debes conocer
Son prácticamente inapreciables. Se elaboran con un composite que simula totalmente el color del diente. No afectan a la masticación ni al habla. Tampoco es necesario cambiar los hábitos de higiene bucodental habituales. El paciente sólo notará una sensación de presión cuando tenga colocado el alineador correspondiente.
Existen varios tipos. Los conocidos como ataches convencionales pueden tener una forma rectangular o elipsoidal. El tamaño puede ser de entre 3 y 5 milímetros de largo, unos 2 milímetros de ancho y 1 milímetro de grosor.
También se pueden crear ataches optimizados para atender necesidades específicas en el movimiento de los dientes. Se tratan de los ataches de rotación, extrusión, de control radicular, multiplanos (para generar movimientos combinados), de mordida profunda y de unidad multidental.
Algunos pueden tener una forma biselada (con un pequeño saliente) cuya función principal es la de servir de soporte para la ortodoncia invisible. Se pueden colocar en posición horizontal o vertical. En algunas ocasiones pueden ir más de uno en el mismo diente.
Los ataches son fundamentales para conseguir que el tratamiento con ortodoncia invisible tenga un alto grado de personalización. Gracias a ellos se obtienen grandes resultados con los alineadores transparentes sin causar apenas molestias en el paciente.
En nuestra clínica dental contamos con grandes especialistas en ortodoncia invisible en Málaga. ¡Anímate y consigue ya una dentadura más bonita y sana! Tan sólo tienes que pedir una cita en la que realizaremos una valoración para proponerte la solución que mejor se adapte a ti.
